Entertainment

Tres puntazos de oro en la visita al conjunto madrileño del Villaverde, primera victoria a domicilio del curso y tercera en las últimas cuatro jornadas lo que pone de manifiesto el cambio rotundo en la dinámica de los nuestros. Los chavales lo dieron todo, no se amilanaron en los duelos individuales y recibieron un merecido premio a la insistencia y la casta. Un grupo que va evolucionando, cogiendo poso y en el que se está poniendo de manifiesto el excelente desempeño de Manu Melgar y su cuerpo técnico, que en un breve espacio de tiempo han conseguido cambiar la cara al equipo con la infalible receta del trabajo y la dedicación máxima generando un clima de confianza determinante.

Un choque igualado en el que hubo que sufrir y emplearse a fondo ante un buen equipo que mostró argumentos competitivos para estar mucho más arriba en la clasificación. Ambos equipos optaron por una presión alta desde el arranque lo que propició, pese a los pocos goles, un choque con oportunidades de peligro en ambas porterías y un partido muy entretenido para el espectador. El Tafa cimentó su victoria en una muy buena defensa, especialmente en el último tramo donde los locales pusieron en liza el portero jugador durante prácticamente 10 minutos, secundada por la labor de Aitor Irujo que cuajó un gran partido y dio poso y tranquilidad al equipo. En el primer acercamiento Unai disparaba arriba tras saque de banda y los locales se topaban con un buen Irujo. Una gran volea de Aitor a la salida de un córner tenía la respuesta del meta madrileño que desviaba a córner salvando a los suyos. Unai armaba un potente lanzamiento desde tres cuartos y nuevamente el cancerbero metía una mano abajo desviando a saque de esquina. En la siguiente Natxo conectaba un remate a bocajarro dentro del área pero el portero la sacaba con muchos apuros. Un error en la construcción propiciaba un robo en la salida de balón pero Irujo desbarataba el peligro. Ambos conjuntos trataban de dificultar la salida de balón asfixiando la primera línea y las acciones se multiplicaban en ambas áreas sin que ninguno de los contendientes lograse ver portería.

Una diagonal a la espalda de la defensa obligaba a Irujo a emplearse a fondo y disponíamos de una falta franca al borde del área que no conseguíamos materializar. Una complicación al borde del área en la que no despejamos el peligro en primera instancia, obligaba a Aitor a sacar un balón bajo palos cuando la parroquia local cantaba el tanto. Restando 8 minutos el Tafa solicitaba un tiempo muerto y en este tramo final del primer asalto tuvo las mejores oportunidades. Zala disparaba con veneno y en el siguiente lance conectaba una gran volea que se perdía rozando el palo. Villaverde lo intentaba a la contra y en una muy clara el portero rozaba lo justo con el pie para desviar la trayectoria de la pelota con Xabi solo para empujar al segundo palo. En quizá la mejor oportunidad Oihan disparaba forzado dentro del área con Íñigo solo en el segundo palo esperando el servicio. Descanso 0-0.

En la reanudación el panorama no cambió y el guión de partido continuó en la misma línea. En los compases iniciales Villaverde salió algo más enchufado y trató de liderar el juego con dos acciones de peligro. En una bonita combinación al primer toque en la frontal, Íñigo finalizaba con un tiro que se iba por línea de fondo y los locales daban la réplica a la  contra. Íñigo buscaba portería en un disparo exterior y en el rechace del portero Juan no encontraba el marco. A los 8 minutos de la segunda mitad llegaba el 0-1 obra de Natxo que recibía una asistencia de Íñigo desde banda derecha y superaba al cancerbero madrileño. El gol afianzó a los nuestros que se empleaban a fondo en tareas defensivas con un gran derroche y mucho esfuerzo. Zala a punto estaba de ampliar la renta en un servicio largo de Irujo y con 10 minutos por jugarse Villaverde apostaba por el juego de cinco algo que mantendrían hasta el final. Una faceta del juego en la que demostraron como ya sabíamos ser muy peligrosos, especialmente por el temple y la mesura que ponían en cada intento y que multiplicaba la sensación de acoso.

El Tafa demostró tener muy bien estudiado al rival cerrando espacios y poniendo toda la carne en el asador con fe y confianza. Aitor tenía en sus botas el segundo yendo con fe a la presión y provocando el error del defensor. Los locales lo intentaban pero no encontraban huecos en la zaga numantina de los nuestros, y a falta de algo más de 3 minutos solicitaban tiempo muerto. Un grave error en la salida de balón daba a Villaverde una opción clara en una falta muy peligrosa centrada al borde del área y Zala, en una asistencia con la mano de Irujo, a punto estaba de superar al meta con una vaselina con mucha intención que adivinaba el portero tirando de reflejos. Un paradón de Irujo en un potente chut escorado servía para entrar en los últimos 2 minutos de auténtico infarto. Restando 56 segundos en la más clara de Villaverde el balón se estrellaba con el travesaño y Manu solicitaba un tiempo muerto para templar los ánimos. Quedaba el último arreón, el último esfuerzo y el equipo lo dio todo para traerse tres puntazos de Madrid obteniendo un botín de peso. Final 0-1.

Vulcanizados Ruiz Tafa: Irujo, Unai, Aitor, Íñigo y Oihan – cinco inicial – Xabi, Zala, Natxo(1), Aritz, Puértolas y David.

Marcador: 0-0; 0-1

Share

Leave a Reply